Para entender la historia de la cerámica en México es importante voltear a ver el trabajo de francés Felix Tissot, gracias a quien se reconoció el desarrollo de Taxco como centro cerámico y de diseño.
Felix Tissot nació en Marsella en 1909 y llegó a Taxco en 1956, donde trabajó con artesanos indígenas de la zona de Guerrero quienes pintaron por años de forma libre cerámica de vajillas, lámparas y objetos decorativos y utilitarios que Tissot creaba y afinaba con delicados acabados por él mismo.
La muestra que se exhibe en el MUSEO FRANZ MAYER sobre el ceramista y diseñador, destaca diversos objetos del mismo que datan desde 1954, año en el que en California compró un horno de gas y comenzó a experimentar con cerámica realizada con polvo de piedras y minerales que usaba como esmalte.
Así también, distintos objetos de Taxco, fuente de inspiración para sus propias creaciones, como la platería con la que William Spratling transformó el rostro de Taxco en 1929 son expuestos para que el observador logre entender un capítulo importante en la narrativa del diseño en México.
La exposición FELIX TISSOT. LO ETERNO Y LO MODERNO estará presente en el MUSEO FRANZ MAYER hasta el 16 de febrero del 2020.